IL NUOVO CINEMA ITALIANO

El pasado martes se realizó la apretura del Festival de Cine Italiano 2014, que se estará llevando a cabo en Cines Paseo Trasnocho en Caracas hasta el próximo 19 de junio. En esta oportunidad y a pesar de las dificultades presentadas por el control de cambios, la Embajada de Italia, el Consulado General de Italia, el Instituto Italiano de Cultura de Caracas, Fundación Trasnocho Cultural y el Circuito Gran Cine unieron esfuerzos para llevar a las salas de Cine Paseo Plus 2 nueve títulos del sentido, y familiar, cine italiano.

Por Sara Kafrouni

Este año, afortunadamente, para los que aman el cine, se pudieron realizar tres de los festivales de cine internacional que por tradición se presentan en el país año tras año, enriqueciendo la vida ciudadana con la cultura a través de las salas del cine.
Este año la selección de las cintas que se presentarán en el Trasnocho corresponden a películas que han recibido importantes reconocimientos, como La Gran Belleza del director Paolo Sorretino, y recientemente galardonada con el Oscar como Mejor Película Extranjera, Cesar Debe Morir de Paolo y Vittorio Taviani, ganadora del Oso de Oro en el Festival de Cine de Berlín 2012, pero también a cintas menos conocidas pero igualmente profundas y que invitan al análisis.
El Embajador de Italia en Venezuela, Paolo Serpi, quien se declaró fiel consumidor del cine, y aunque reconoció que en ciertos momentos de la historia del cine italiano la calidad ha bajado, aseguró que siempre han tenido una buena cinematografía, lo cual se refleja en la lista de películas seleccionadas para la proyección de este año. “Aquí hay películas como una que ganó el Oscar, La Gran Belleza, y otra película la de los hermanos Taviani que ha ganado el Oso de Oro de Berlín es Cesar Debe Morir, y las otras películas son también de un nivel muy alto, buenos actores, y nuevos actores también, que son la nueva generación del cine italiano. Yo había dicho que me parece un cine introspectivo, de nuestra historia reciente, de nuestra realidad actual, pero la verdad muy introspectivo, que está conectado con nuestra realidad física. Me refiero a lo artístico, a la naturaleza, que están siempre presente en todas; aún en las más cerradas y cruentas, pero siempre hay este aspecto que para nosotros es importante, sobre todo de ese sentido de lo bello, de belleza, que es parte de nuestra forma de ser. Cuando uno sale [del cine] y continuas pensando en los diálogos, en la vida de la película, que lo estás interpretando después, eso es un signo de calidad. Creo que estas películas la tienen todas, la calidad”, señaló el Embajador Paolo Serpi, quien además comentó sentirse satisfecho porque hay una gran comunidad venezolana que consume todos los años el cine italiano y lo recibe de muy buena manera, sobre todo el cine italiano actual, de la nueva generación de actores y directores.

María Helena Freitas, directora general del Circuito Gran Cine, comentó que el Festival de Cine Italiano, pese a las dificultades que vive Venezuela, se ha convertido ya en un proyecto mucho más sólido y posicionado en una buena parte de la población venezolana que se enriquece con la cultura de Italia y su gente; por lo que José Pisano, director de programación de Cines Paseo Trasnocho, afirmó que cada año es notable la presencia de un público creciente que le encanta vivir la experiencia cinematográfica en el cine, sin importar las copias piratas que existan en el mercado de las proyecciones, y puso como ejemplo la cifra de más de 15 mil espectadores en una sala de 108 butacas, que tuvo la cinta Hombres Al Dente de Ferzan Ozpetek. María Helena Freitas aseguró que esperan que en las próximas ediciones del festival se puedan disponer de más títulos y se pueda abarcar una mayor cantidad de salas, pues aseguró que además de ser una gran evento, Venezuela no solo es un país de desgracias, pues tenemos cosas maravillosas que ofrecer al mundo y a los venezolanos.

LAS PELÍCULAS
En una proyección especial, se presentó la cinta César debe morir de Paolo y Vittorio Taviani. Esta es una cinta basada en la dramatización de la pieza de William Shakespeare Julio Cesar, y llevada a cabo en la prisión romana de Rebibbia, en donde los actores son presos de máxima seguridad que jamás reciben visitas. El elenco ensaya la obra en las instalaciones de la cárcel mientras terminan de ambientar el teatro de la prisión, donde escenifican solo la escena final de la Batalla de Filipos. A la representación realizada por los presos asiste un público externo llenando la sala por completo, lo que resulta curioso para muchas personas que pensarían: ¿Quién va a ir a una prisión a ver una obra? Pues, la respuesta es sencilla. Los italianos en general son personas que aman la cultura, capaces de hacer colas en la lluvia para entrar a un “Palazzo Comunale” a ver un cuadro prestado por el Vaticano, por ejemplo. Esto se refleja claramente en la última frase de uno de los actores en César debe Morir, al decir: “Desde que conocí el arte, mi celda se convirtió en una cárcel”. La película está basado en hechos reales, pues los actores son presos y ex presidiarios, y fue filmada en la cárcel de Rebibbia.

Otras películas son El Intervalo de Leonardo Di Costanzo, La Gran Belleza de Paolo Sorretino, Magnífica Presencia de Ferzan Ozpetek, Los Tocados de Matteo Rovere, Fue el Hijo de Daniele Ciprí, Dueños de Casa de Edoardo Gabriellini, El Descubrimiento del Amanecer de Susana Nicchiarelli y Los Equilibristas de Ivano de Matteo. Las películas estarán disponibles durante 15 días y representan una selección nueva e interresante del nuevo cine italiano que se estará presentando en el Trasnocho Cultural en Caracas.